Composición musical de Jacqueline Nova, escrita en 1965 para un quintento de cuerdas, un sexteto de cuerdas (con contrabajo) y un piano. Ganadora del primer premio de música de cámara del III Festival de música de 1966 de Caracas (Venezuela). “Como su título lo indica –señala la musicóloga Ellie Anne Duque– hay doce sucesos musicales a lo largo de la obra. Se diferencian entre sí, especialmente, por los cambios de tiempo y de expresión. Hábilmente se suceden estados de ánimo contrastantes que emplean técnicas variadas […]”. La obra es un homenaje de Nova al compositor austriaco Alban Berg. Ver Nova Sondag, Jacqueline.