Artesanías de madera elaboradas por los indígenas noanamá y emberá del Chocó. Son unos bastones de mando destinados a los jaibanás o brujos curanderos de la tribu que utilizan como instrumento mágico para establecer vínculos con el mundo de lo sobrenatural. Las figuras talladas en los bastones representan flechas, monos, hombres o mujeres desnudos y animales apareados.